BELÉN G. CANTAVELLA

Belén García
Cantavella
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La periodista Belén García Cantavella lleva toda una vida dedicada a la comunicación, un mundo fascinante en el que ha sido capaz de ir creciendo profesionalmente con proyectos muy diversos. En And Magazine se convierte en protagonista de una gran editorial que nos ha permitido conocerla mejor profesional y personalmente, haciendo un repaso a su trayectoria y descubriendo sus próximos trabajos.

¿Cuál ha sido tu trayectoria profesional hasta el momento?

Ufff… Es difícil resumirla. Empecé en Radio Castellón Cadena SER, donde toqué todos los palos: Los 40 Principales, A vivir, Hoy por Hoy, Informativos, Localia… Aprendí mucho en aquella época. Después llegó mi etapa en Canal 9, donde presenté espacios deportivos, culturales y de sucesos. También fui reportera en En Connexió. Viví con tristeza la desaparición de esa televisión y el vacío que dejó en el mundo audiovisual valenciano. A partir de entonces, me dediqué a redactar artículos para distintas publicaciones, entre ellas, Vice. Pero nació À Punt y participé en dos de sus proyectos: Family Duo y Terra Viva. Después llegó oportunidad de trabajar en los informativos de Antena 3. Y en ello estamos. Ahora también presento un magazine en Levante Tv llamado Revista de Sociedad que me encanta. Y que no me olvide de mi programa de radio favorito, Nauru On, de UJI Radio. Somos cinco frikis haciendo y diciendo lo que nos da la gana. Es muy divertido. He hecho y hago muchas cosas más, en gabinetes de prensa, agencias de publicidad… Los que nos dedicamos a esto sabemos que los proyectos terminan y hay que estar preparado para reinventarse constantemente.

¿Qué dirías que te ha aportado el mundo de la comunicación?

Me ha dado la oportunidad de disfrutar, porque esto es lo que más me gusta hacer: comunicar. Te sientes plenamente realizado si te apasiona tu trabajo. Estás en lugares increíbles, vives intensamente la actualidad, ayudas a personas y conoces a gente maravillosa que de otra forma sería inaccesible. Lo mejor han sido siempre mis compañeros de trabajo, que siguen siendo amigos a través de los años. ¡Y son un montón!

Tienes experiencia en perfiles muy distintos en la comunicación, ¿Qué proyectos de tu carrera te han marcado más?

Todos han dejado huella en mí y de todos he aprendido. Hay recuerdos imborrables que me acompañarán siempre y esa es mi suerte. Pero sin duda, trabajar durante la pandemia, narrar diariamente las cifras referidas al contagio y las muertes, ha sido lo más duro de mi carrera.

¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo? El periodismo es una profesión tan bonita y difícil a partes iguales…

Tú lo sabes bien. Con esta profesión no te haces rico, es puramente vocacional. Me encanta sentir la adrenalina en los directos, ordenar la información en mi cabeza para darle el sentido que merece en 20 segundos y hacerlo bien para llegar a la audiencia. Los reportajes deben contar una historia bien hilada y a mi me parecen especialmente desafiantes y gratificantes. En las entrevistas procuro ser natural, divertirme con el entrevistado si la temática lo permite, y en otros casos, hacer las preguntas que cualquier persona de pie haría, de la forma más sencilla posible. Escuchando y apostando por la empatía al 100 %. En general, es un trabajo muy enriquecedor, pero tremendamente complicado por su inestabilidad.

En todos estos años has podido conocer a muchas personalidades, ¿quién te ha sorprendido más? 

Es la pregunta más difícil de todas, porque la gente que más me ha impresionado es anónima. Pero si hablamos de famosos, me quedo con Carlos Latre, Juanjo Artero, los Morancos, Paco León y Maribel Verdú. O bien porque me he reído mucho o bien porque me han parecido encantadores, cercanos. Una vez le lancé una pregunta al aire a George Clooney. No cuenta, pero impresionarme, me impresionó.

Para And Magazine has cambiado el micro por el modelaje, ¿cómo has vivido la experiencia?

Ha sido muy divertido. Begoña Campos me lo propuso y no me lo pensé dos veces. Así, de paso, le damos visibilidad a la moda bajo otro prisma. Las mujeres reales, con todas esas imperfecciones que no suelen verse en las editoriales, también nos vestimos, nos maquillamos y nos arreglamos. Por eso me pareció interesante participar de esta sesión, que refleja que, con el estilismo adecuado, todas podemos estar estupendas. ¡Gracias, equipo!

¿Qué significa para ti la moda? 

Es una expresión más de tu personalidad, tu actitud y tu estado de ánimo. Pero también es arte, nunca podemos menospreciarla. A través de ella se reflejan la historia, la sociedad y la cultura.

¿Cómo definirías tu estilo? ¿Te gusta seguir las tendencias?

Diríamos que yo sé lo que me favorece y lo que no. Intento ser actual, práctica y sencilla. Pero me encanta la ropa con un punto sofisticado o deportivo. Las camisetas siempre anchas, para jugar con ellas. Botas en invierno, cuñas de esparto en verano. Los vaqueros y las camisas blancas pueblan mi armario. Y siempre que puedo, invierto en una prenda o accesorio que marque la diferencia. Las tendencias solo las acojo si se acoplan a mí.

La imagen comunica mucho y más en un medio como la televisión, ¿cómo has adaptado la moda a tu profesión?

Cada trabajo requiere un estilismo. Cuando estuve en Terra Viva iba siempre con las botas de montaña o de agua a cuestas. ¡No puedes hacer una ruta o meterte en un arrozal enfangado de otra forma! En los informativos he optado siempre por ropa clásica y colores neutros, para no llamar la atención más que la noticia. Pero un magazine te permite ir más chic. ¡Ahí te enfundas los taconazos y a brillar!

¿Crees que la moda refleja el estilo de las mujeres actuales? ¿Cómo se puede adaptar a la edad y las circunstancias?

Creo que ya no hay reglas. Las mujeres actuales son tan diversas y tienen un estilo tan particular… La ropa ya no tiene edad, tiene el momento que cada persona quiera vivir. Las adolescentes van todas iguales porque en esa etapa quieren encajar a toda costa y se mimetizan. Todas lo hemos hecho, es ley de vida. Pero después, desarrollan su personalidad y optan por distinguirse más. La moda es una fuente de inspiración y a través de ella, cada cual escoge su camino. Y sí, habla de lo que ocurre en cada momento. Después de la pandemia, por ejemplo, hemos comprobado que nos sentimos mejor con estilismo cómodos y relajados. Muchas mujeres han preferido dejar de luchar contra las canas y rompiendo los cánones, lucen un pelo increíble. Hemos aprendido a centrarnos en lo importante.

Después una temporada tan extraña y difícil por la pandemia, ¿cómo afrontas esta nueva etapa?

Siempre afrontaré la vida con ilusión, pese a lo dura que es. Personalmente, este periodo de tiempo ha hecho que me replantee muchas cosas a nivel profesional y personal. Dejando de lado los devastadores efectos económicos, la crisis sanitaria o los seres queridos que hemos perdido en el camino, por dentro, algo nos debería remover en un sentido positivo. Siempre le pregunto a la gente si está bien en casa, si se ha dado cuenta de que existían carencias en su vida. Porque salir a la calle no va a solucionar eso. Hay que rodearse de personas que nos sumen, ayuden y protejan. Y nosotros hacer lo mismo con ellas. Si eso está bien, si tú estás bien, estar encerrado no debería importar, es una circunstancia más. En cuanto podamos, eso sí, disfrutemos de la libertad, fuera de horarios y restricciones. Ayudemos a los hosteleros, a los comercios, al cine, al teatro… que tienen que renacer. Pero replanteemos otras necesidades interiores también. Yo ahora me siento fuerte, llena de amor y paz. Tengo ganas de empezar de nuevo y espero pronto, después de vivir en Tarifa, Barcelona o Valencia, volver a casa. Me encantaría.

 

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