Entrevista con LUIS MADRID

El director de Agora Lledó International School, Luis Madrid, se une un año más a las páginas de And Magazine para contarnos cómo ha sido la evolución del centro educativo en los próximos años. La internacionalización o un método de enseñanza holística que combine sus vertientes académica y emocional, junto a unas instalaciones punteras adaptadas a estas características, son solo algunas de las claves del funcionamiento y resultados de Agora Lledó.

¿Cómo ha sido la evolución de Agora Lledó en los últimos años? 

Agora Lledó International School es el claro ejemplo de cómo un colegio se adapta a las nuevas exigencias de la sociedad en pleno SXXI. Somos un colegio que se ha ido transformando hacia un entorno digital, con la incorporación de la más alta tecnología como parte de su currículum y quehacer educativo, y como apoyo inestimable a la educación en papel, que para nada ha sido sustituida.

¿Hacia dónde se dirige la expansión del colegio?

Estamos incorporando todos los programas del Bachillerato Internacional, desde Infantil a Bachillerato, sin duda el sistema educativo y metodológico de mayor aceptación a nivel mundial, y que se alinea exactamente con otro pilar importante en la evolución del colegio, y que es el aumento de todos los aspectos que tienen que ver con la globalización que nuestra sociedad, y también nuestra región está teniendo.

Contáis con una cantidad notable de familias internacionales, ¿qué buscan en la educación de sus hijos?

Hemos pasado de un porcentaje mínimo de familias internacionales, a más de un 25 % en cinco años. Son familias que buscan colegios multilingües como el nuestro, con programas educativos que vayan más allá del currículum nacional y, lo más importante, que sean centros que tengan un sello diferenciador y personalizado como Agora Lledó, con deportes como la natación, o una amplia variedad de extracurriculares, a una formación artística que se puede ofrecer gracias a que somos también un Centro Conservatorio Profesional de Música.

¿Qué importancia tiene adaptar las instalaciones a vuestro método educativo?

En la misma línea de evolución, otro aspecto muy importante ha sido el total rediseño de instalaciones y espacios educativos que el colegio ha tenido. Hace ya casi tres años hicimos una clara apuesta por tener un colegio realmente innovador, que marcara las pautas de la educación del futuro, pero haciéndolo ya presente, a través del diseño de espacios educativos basados en el concepto “play to learn”. Esto significa que el aprendizaje debe salir “más allá del aula”, alineado con los más puros requisitos de aprendizaje del Bachillerato Internacional, y donde cada espacio del colegio debe estar diseñado para poder apoyar las experiencias educativas y el desarrollo de habilidades y destrezas requeridas por la sociedad actual, y sobre todo por las universidades. Destrezas como trabajo en equipo real, espíritu crítico, saber hablar en público, reflexión sobre lo aprendido, y capacidad de investigación son requisitos que pueden desarrollarse en estos nuevos espacios educativos que de manera pionera en España hemos implementado en Agora Lledó.

¿Cuál es la diferencia en cuanto a métodos de educación con respecto a otros colegios?

Lo que destacaría de nuestro método es que podemos ofrecer una educación más personalizada que otros colegios. Al ser un colegio en el que damos cobertura a la individualidad de cada alumno, consideramos tanto sus debilidades como fortalezas. Cada alumno es único, y por ello debemos ser capaces de adaptar nuestra metodología a las diferencias de aprendizaje y emocionales que los nuevos tiempos nos han traído. Temas como el bienestar emocional, o la seguridad en el más alto y completo sentido son un pilar fundamental de nuestro trabajo.

¿De qué herramientas disponéis para que cada alumno pueda ofrecer lo mejor de sí mismo?

Desde este año incorporamos como colegio pionero en la provincia a un equipo multidisciplinar, liderado por la especialista Nerea López, para poder llegar al máximo posible de atención y posibles dificultades de aprendizaje, y que se actúen dentro del centro mismo. Este punto, más el apoyo que nuestras nuevas instalaciones proporcionan al aprendizaje fuera del aula, de un modo holístico, innovador y que desarrolla tanto la parte académica como las habilidades y destrezas de conocimiento, son, sin duda, nuestras grandes diferencias y fortalezas que lleva a nuestros alumnos a “aprender más, mejor y más felices”, haciéndoles sentirse seguros, felices, y sobre todo atendidos. Con un nivel de exigencia académico del más alto estándar como lo demuestran año tras año nuestros resultados académicos tanto en Selectividad, como exámenes de Bachillerato Internacional, o las diferentes pruebas externas de idiomas que ofrecemos.

¿Cómo valoras el aspecto de la internacionalización de un colegio?

En un mundo cada vez más globalizado ya es imposible pensar en un colegio que no sea internacional. Creo que poder compartir con alumnos de otras culturas e idiomas enriquece mucho a la comunidad de un colegio y es la manera en la que nuestros jóvenes se van enriqueciendo a la vez que les ayudamos a ser mucho más tolerantes, flexibles e inclusivos. Es, sin duda, uno de los grandes retos que tenemos los colegios: ser capaces de integra a cualquier alumno, sea cual sea su nacionalidad, cultura, religión o idioma. Para ello, los colegios debemos tener programas fuertes de integración, de adaptación curricular y lingüística y, sobre todo, de apoyo para conseguir de un modo real que nuestros alumnos sean capaces de recibir una educación que ayude a conseguir un mundo mejor, más pacífico y sostenible.