La importancia de la SALUD MENTAL

por
Juan Tosca

La definición de salud mental de la OMS refiere a “un estado de completo bienestar físico, mental y social, no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. A modo general podemos definir la salud mental como el bienestar general de la manera de pensar, de regular los sentimientos y comportamientos ante la vida, cómo manejamos el estrés, cómo nos relacionamos con el resto de seres humanos, cuál y cómo es nuestra toma de decisiones. La salud mental incluye nuestro bienestar emocional, psicológico y social. 

¿Qué factores son los que determinan el estado de nuestra salud mental? Los factores biológicos, los genes y el cerebro podemos afirmar que son una de las partes que repercuten en cambios en el organismo. Determinan estados anímicos que influyen en nuestra manera de actuar, sentir y, por tanto, de nivelar nuestra salud mental. Por otro lado, a la vez que conectados con los anteriores, están las experiencias de la vida, los traumas, posibles abusos sufridos, etc. que influyen en nuestra personalidad y por tanto en la toma de decisiones, afrontamiento de situaciones y conflictos en la vida, etc. y por consiguiente de nuevo sobre nuestra salud mental. La tercera lista de factores es el estilo de vida, la dieta, la actividad física y consumo de sustancias. Aunque hemos diferenciado en tres el listado de factores, todos ellos interactúan, son condicionantes interrelacionados que repercuten en el estado de la salud mental de cada individuo.

A lo largo de nuestra vida la combinación de todos los factores va creando una personalidad dentro de la cual se gesta una autoestima, seguridad, confianza, capacidad de gestión emocional y de conflictos, etc. que determinan cómo nos sentimos y actuamos ante situaciones concretas y generales, siendo así nuestra salud mental óptima o no óptima.

El concepto inteligencia emocional, así como el de resiliencia van muy ligados al de salud mental, ya que una buena inteligencia emocional y resiliencia dan como resultado una buena salud mental. La inteligencia emocional, en cierta manera, depende de los mismos factores; por lo que están interrelacionadas y son dependientes.

La salud mental debe cuidarse, no vale decir “yo soy así”, “no puedo aprender” o frases y pensamientos similares que nos llevan a la dejadez y exceso de conformismo con un estado no propicio, ¿cómo podemos mejorar nuestra salud mental?

– Acudiéndose a profesionales que nos ayuden a trabajar nuestra autoestima, la forma de relacionarnos, gestionar los traumas del pasado, reconocer los errores y trabajar en su cambio, etc.

– Actividad física. Siempre se ha dicho “mens sana in corpore sano”, totalmente cierto, contra cualquier malestar psicológico/mental el ejercicio es una gran medicina que revitaliza, nos reestructura y estabiliza el sistema químico cerebral. La mejor medicación es el ejercicio adaptado a cada individuo, siendo moderado, lúdico y preferiblemente (no necesario) divertido.

– Buena y sana alimentación.

– Eliminación total de cualquier tipo de drogas y estupefacientes, así como el alcohol (o al menos consumo muy moderado); ya que añadido al daño orgánico y cerebral que generan, también son depresores generando graves y serias consecuencias sobre nuestra psique, cognición y por tanto sobre la salud mental.

Es cierto que han existido muchas reticencias históricamente respecto a acudir al psicólogo/a; sin embargo, con el paso del tiempo ha ido evolucionando y ya se ve mayoritariamente como algo muy normal acudir a los centros sanitarios igual que se puede ir al médico, masajista, fisio, etc. En la actualidad la experiencia nos dice que los que cuestionan y critican a quien acude al psicólogo/a suelen ser quienes más lo necesitan. Cualquier persona aparentemente sin problemas y con una óptima salud mental debería acudir al psicólogo/a con cierta regularidad al igual que habría que hacerlo al masajista, y los psicólogos/as no estamos excluidos de hacerlo, numerosas son las razones que avalan este comentario (razones a tratar en otro artículo). La salud mental depende en gran medida nuestro esfuerzo, con ganas y trabajo la mejoraremos seguro.

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