PAU TORRES

Pau Torres protagoniza nuestra portada 18 y no podemos estar más orgullosos. Uno de los nombres del momento de nuestra provincia que suena en todo el mundo. De su talento ya no hablamos como promesa del fútbol, sino como protagonista del presente futbolístico en un momento de su carrera. El canterano del Villarreal es tendencia y no podía faltar en las páginas de esta revista. 

¿Cuál ha sido tu trayectoria profesional hasta el momento?

Hasta ahora mi trayectoria profesional ha estado siempre ligada al Villarreal, exceptuando el año en el que salí cedido al Málaga. Con ellos empecé a jugar en una categoría más exigente como la segunda división. El año anterior con el filial del Villarreal habíamos estado a punto de subir a segunda, pero, aunque no lo conseguimos, tanto el club como yo entendíamos que yo debía seguir mejorando como futbolista y seguir haciéndome en una categoría un poco superior y en ese momento en el primer equipo no había sitio para mí. Necesitaba hacerme jugador lejos de Vila-real, por así decirlo. En Málaga viví otro tipo de fútbol, entré por primera vez en un vestuario profesional y viví de primera mano las necesidades de un club que en ese momento acababa de bajar de primera división y necesitaba estar durante todo el año en la parte alta de la clasificación para poder volver a primera. Fue un año exigente, bonito y con buenos recuerdos a nivel futbolístico. Podríamos decir que el objetivo final no se consiguió, porque caímos eliminados en la primera ronda de ese play off de ascenso a primera división, pero fue un año que me sirvió para crecer mucho futbolística y personalmente, ya que era mi primer año alejado de mi familia. Crecí mucho como futbolista, viví exigencias, experiencias nuevas en otra categoría. Tuve dos grandes entrenadores como Muñiz y Víctor Sánchez del Amo, que me ayudaron mucho en ese momento a ir creciendo, que entendieron mi etapa de mejora y ellos eran los primeros que querían que yo mejorase y les estoy muy agradecido. Y a partir de ahí vuelvo al Villarreal con Calleja. Tanto él como el resto del club depositaron en mí su confianza para pertenecer a la plantilla del primer equipo. Ya en el Villarreal, conseguimos clasificarnos para Europa League, que era algo muy importante para el club. Este último año ha sido el mejor, tanto a nivel personal como a nivel de club. Se ha conseguido ese primer título europeo para nuestra historia y es un año que vamos a recordar para siempre. Ahora afronto mi tercera temporada en el primer equipo del Villarreal y es una etapa diferente, en la que yo soy el primero que me tengo que exigir más cada día para seguir mejorando y para que el equipo esté compitiendo por grandes cosas.

En la última entrevista con And Magazine nos hablaste del sueño cumplido que suponía formar parte de la selección nacional, ¿qué ha supuesto participar en unos Juegos Olímpicos representando a España?

Formar parte de la selección en estos campeonatos ha supuesto cumplir un sueño. Cuando uno es pequeño siempre ve estos torneos de la selección que sigue todo el país por la tele, y el poder participar en uno de ellos ha sido conseguir un sueño. Y se viven de manera diferente… La Eurocopa con más exigencia y repercusión a nivel futbolístico. Y en las Olimpiadas más para disfrutarlos, vivir una experiencia totalmente diferente, en la que pasamos a ser atletas y no futbolistas, porque nos tratan a todo por igual. Estoy orgulloso de haber conseguido llegar a semifinales en la Eurocopa y de esa plata que conseguimos en los Juegos Olímpicos.

El seleccionador ha apostado por un equipo joven, ¿qué ambiente se respira dentro de él?

Sí, es verdad… Somos un equipo joven que se combina con la experiencia de los más veteranos. Pero está viniendo mucha gente joven con ganas de aprender, de triunfar y de que las cosas salgan bien. Ese toque de juventud aporta que el grupo sea muy bromista en general. Aunque haya que trabajar, siempre hay alegría. Te diría que las ganas de los jóvenes hacen que todo el grupo se contagie para que todo sea especial siempre y creo que eso es algo que hay que mantener. Cada vez que vemos a un grupo como la selección es bueno que las cosas sean alegres y que haya ganas de trabajar y de seguir mejorando, sobre todo.

También sigues trabajando con el Villarreal, ¿qué valoración haces de la última temporada?

La última temporada con el Villarreal fue la temporada soñada porque conseguimos finalizarla logrando nuestro primer título europeo, la Europa League. Esto nos permitía también poder gozar de la Champions este año, jugar una final de Súpercopa que era para disfrutarla y fue una manera de posicionar al club. Aunque todo el mundo siempre ha tenido bien considerado al Villarreal, el título logró posicionarlo en un nivel diferente porque ahora ya somos campeones. Eso también hace que los jugadores quieran venir al Villarreal para crecer y optar a grandes cosas, y todo eso hace que el club crezca muchísimo. Para mí ha sido un sueño poder conseguir el primer título porque era algo que siempre había deseado. Entrar en la historia del club por eso es algo inmejorable e inolvidable.

Para conocerte un poco mejor…  ¿en qué referentes te has fijado a lo largo de tu carrera?

A lo largo de mi carrera, sobre todo cuando era más pequeño, siempre me iba fijando en esos jugadores con los que compartía posición, como pueden ser Gerard Piqué o Sergio Ramos. La realidad es que siempre me he identificado más con Piqué por su estilo de juego, me gustaba mucho su personalidad y cómo jugaba cada partido, esa salida de balón que tenía. Y dentro del club mi referente siempre ha sido Bruno Soriano porque él también era un chico de la casa que apostó por quedarse en el club cuando podría haber salido a buscar experiencias nuevas, sobre todo cuando el equipo descendió. Pero él decide que se queda en el Villarreal para devolverlo a primera. Sin Bruno Soriano el Villarreal nunca hubiera sido campeón de la Europa League. Así que para mí él es mi mayor referente; una persona, un compañero y un amigo al que admiro mucho

¿Cómo llevas el haberte convertido en alguien tan conocido, incluso admirado?

Bueno, creo que no se trata de ser conocido o admirado. Al final uno se siente orgulloso de lo que va consiguiendo, aunque es verdad que esto va muy rápido y no tienes tiempo de pensar en las cosas que has logrado porque siempre vienen retos nuevos. Me alegra mucho cuando los niños vienen y me piden alguna foto porque yo también he estado en ese lado; siempre los trato de la forma que a mí me gustaba que me trataran. Siempre intento ser lo más amable que puedo porque para mí puede ser una foto más, pero sé que para ellos es importante. Si con esos pequeños gestos podemos hacer felices a los más pequeños, yo encantado. Quizá puedo ser un referente dentro de la cantera porque soy un canterano que ha llegado al primer equipo, así que yo encantado de que cualquier joven se pueda fijar en mí y lo afronto con toda la humildad del mundo y buena fe. Siempre intentaré ayudar al máximo a los canteranos que vengan detrás y a cualquier niño que se acerque, porque con un pequeño gesto les podemos hacer felices. Eso es algo que también me llena.